Prestar toda la atención a un producto de excepción
Esta bebida rebosante de personalidad, se puede degustar tanto en un aperitivo como en una cena. Simplemente hay que tener el vaso adecuado.
El vaso ancho que aparece con frecuencia en las películas americanas, no es en realidad el más utilizado.
Para degustar correctamente un whisky escocés, la mejor opción es una copa de vino. Sorprendente, ¿verdad? La forma de tulipán de la copa concentra los aromas y permite ofrecerlos en todo su esplendor al degustador.
El pie de la copa evita también que las manos calienten el líquido y el whisky se mantenga a temperatura ambiente preservando todos sus matices.
De todas formas, el whisky no se consume únicamente solo. Constituye también una excelente base para elaborar cócteles.
El famoso vaso alto o tumbler que utiliza James Bond es perfecto para servir combinados, desde los más clásicos a los más innovadores.
Estos vasos permiten añadir whisky, bebidas para mezclar y cubitos de hielo antes de usar la coctelera.