El Loch na Keal es un imponente loch marino, un brazo de mar tan grande que casi corta la isla en dos. Para bordearlo, he tomado una pequeña carretera costera. Es tan estrecha que no se puede ir a más de 30 km/h.
Pero, ¡qué paisaje! Estoy a la entrada del Loch na Keal. Este paso hacia el océano está protegido por un rosario de islas. Es tan mágico que me pongo a soñar.
¿Acaso estos islotes no podrían ser, en realidad, las ondulaciones del cuerpo de un monstruo marino? Si nunca se ha podido ver al monstruo del Loch Ness, quizá sea porque no se ha buscado en el lugar correcto. En ese caso, sería necesario encontrarle otro nombre que no sea Nessie. Creo que «Kealie» encajaría bastante bien.