Con sus 24 km de superficie, el loch Tay es también uno de los más profundos de Escocia. Tiene más de 150 metros de profundidad. De pie sobre el embarcadero, me entran ganas de explorarlo.
El loch Tay resulta ideal para practicar la navegación y los deportes náuticos. Me imagino que atravesarlo en canoa sería una experiencia absolutamente mágica. Las colinas se reflejan sobre las aguas negras del loch Tay. Tal cual un espejo.
En este momento, las aguas están tranquilas. El sol acaba de salir. A media mañana, llegarán los turistas. Pero por unos instantes más, el loch Tay me pertenece en exclusiva.